Un estudio realizado en Harvard, continúa lo logrado por científicos de Stanford y logra detectar que la proteína GDF11 permite revertir el envejecimiento en ratones.
La proteína llamada GDF11 puede ser la clave para revertir el envejecimiento, no simplemente retrasarlo.
En 2005, un grupo de científicos demostró que la sangre de ratones jóvenes ayuda a otros ratones de prueba que son mas viejos, a regenerar el tejido muscular dañado y un nuevo estudio del Harvard Stem Cell Institute identifica a la proteína GDF11 como la principal causa.
Los primeros experimentos conducidos en Stanford trataban de unir los sistemas circulatorios de dos ratones, en un proceso conocido como parabiosis, y reveló síntomas de envejecimiento prematuro para el ratón joven, mientras que reveló una recuperación más rápida en los ratones más viejos.
Amy Wagers, perteneciente al grupo de científicos de los primeros experimentos en Stanford, ahora también hace parte del equipo de científicos de Harvard que lograron identificar a la proteína GDF11 como la causa de lo experimentado. El reporte indica que los ratones tratados con la proteína mostraron una mejor cognición, más resistencia y “mejoras en la función de todos los órganos estudiados hasta ahora”.
Otro estudio realizado en la Universidad de California en San Francisco (University of California in San Francisco) ha concluido que la simple transfusión de sangre de ratones jóvenes mejora la función cerebral de ratones más viejos.
Cuando se habla de poder controlar o retroceder el envejecimiento muchos estudios se han realizado, pero pocos han logrado obtener conclusiones tan especificas y han generado mucho entumíamos.
Los investigadores de Harvard estiman que las pruebas en humanos podrían comenzar en tres a cinco años. Tocará seguir esperando para ver si alguien logra retroceder el envejecimiento de manera efectiva. Recordamos que anteriormente también vimos otros interesantes avances con relación al antienvejecimiento logrado en Hong Kong y como unos biólogos descubren como las células de levadura revierten el envejecimiento.
[Vía:ScienceMag]